martes, 15 de abril de 2014

Shout. Shoot.

Hacía ya mucho que no soltaba un suspiro.
Un suspiro de estos, escritos.
¿Y acaso hace falta decir algo más?
Pues que a buen entendedor pocas palabras bastan.

Grita.

Espina.

Parece, aunque a veces sólo lo parece, que por cada cosa mala que a uno le dicen, diez de las buenas se olvidan, se escapan. Como si nunca ...